Todas aquellas bicicletas de pedaleo asistido que no superen los 250W ni los 25km/h serán consideradas bicicletas convencionales a efectos legales y de circulación.
Era un secreto a voces, porque tanto los fabricantes como los gobiernos de cada país ya habían establecido tácitamente esos límites, pero es relativamente fácil encontrar modelos de bicicletas eléctricas que superan con creces los 250W y los 25 km/h convirtiéndose en verdadereas balas sobre ruedas, y a ese tipo de vehículo no se le debería permitir rodar por las sendas ciclistas, carriles bici repletos de niños y, evidentemente aceras bici.
Se trataría pues de “otro vehículo eléctrico” que acabará estando legislado como cualquier moto eléctrica que ya nos podemos encontrar hoy en día por nuestras calles, matriculación, carné y casco incluidos.